martes, 24 de junio de 2014

Evolución

Han pasado ya 1 año 6 meses y 12 días desde que tome la decisión quizás que mas me ha marcado estos últimos años: empezar con una dieta vegana. Visto el éxito de mi experimento (que empezó siendo eso) y habiendo estado informándome y leyendo muchas cosas estos últimos días, he decidido que ya es hora de empezar a tomarme la coherencia mucho mas en serio que hasta ahora.

Esta claro que el paso mas difícil siempre es el primero. Todo lo que me voy a comprometer hasta ahora solo es profundizar en las decisiones tomadas para intentar limar los hábitos que aún están muy lejos de un estilo de vida libre de sufrimiento (humano y animal).

  1. Vestir ropa libre de esclavitud humana en el sentido burgués de esclavitud vamos. Es decir, nada de zapatillas Made in Bangladesh, China, etc. Me aseguraré de que todo lo que use para vestirme sea o de segunda mano, o de comercio justo, o fabricado en un país donde garanticen un salario mínimo y unas ciertas condiciones laborales mínimas. He querido poner este el primero por dos motivos. El primero es que ya había barajado antes esta decisión, mucho antes incluso de empezar con la dieta vegana; pero la pereza tiró demasiado. El segundo es una razón obvia, no es coherente evitar el sufrimiento animal y no hacer nada cuando se trata de tu propia especie. Recomiendo a todo el mundo, y en especial a veganos y vegetarianos, que sean coherentes y asuman esta decisión como parte de la lucha contra la explotación animal (ya que la explotación del hombre por el hombre también existe).
  2. Siguiendo con la ropa abandonar totalmente el uso de animales en las zapatillas. Las zapatillas es quizás uno de mis puntos débiles. Pero a partir de ahora, y con toda esta pequeña revolución, empezaré a ser mas consciente de lo que compro y de que está hecho, y buscaré calzado aunque me tenga que patear 800 tiendas.
  3. Mirar los aditivos. Si muy bien, no como carne, ni patatín ni patatán, cuando me entero que muchos de los aditivos que se usan son de origen animal. ¡Éramos pocos y parió la abuela! Pues nada a ir con una lista de sustancias prohibidas como los ciclistas y a mirar numeritos. E 119 si, E 120 no, E 121 si, ... Me lo tomo con humor porque es la única manera de hacerlo. Se acabo el pan de molde (al menos Bimbo), se acabaron los chicles, y muchas cosas que iré descubriendo. Si esto no es masoquismo que baje dios y lo vea. En fin buen humor ante todo.
  4. Productos testados en animales fuera. Siempre fue mi asignatura pendiente. Otra cosa que siempre he querido hacer y, quizás por vagancia, o por malos hábitos nunca he podido. Y esto tiene dos vertientes
    1. Fuera tabaco en cajetilla, salvo honrosas excepciones. Pongo aquí la info para el que quiera leer. No quiero decir mas sobre esto.
    2. Uso de champús, geles y demás no testado en animales. Otra cosa obvia de la que no hay mucho mas que decir.
En fin como veis no hay nada especialmente radical, sino es mas bien un montón de correcciones que tenía que hacer en un ejercicio de coherencia. No soy un jodido bicho raro, solo soy una persona que quiere ser coherente en su vida con su moral, y que ha decidido que ni la dificultad, ni el precio dentro de lo posible, van a estar por encima de su forma de pensar. Señores coherencia, si aman a los animales de verdad, no sean cómplices de su explotación.

Por último quisiera invitar a todo el que quiera decirme algo, desde una crítica hasta una alabanza (aunque he de decir que no me gustan mucho) a que no se corten y me la expresen sea por vía email (juansisantm@gmail.com) o FB (Juansi Simon Sant). Todas las ideas que queráis expresar van a enriquecer tanto al que las expresa, como al que las recibe e intenta contestarlas. Yo siempre agradezco la crítica constructiva por su ayuda a corregir en partes de mi forma de pensar que puedo ser incoherente.

Salud!

viernes, 6 de junio de 2014

El sitio de mi recreo

Ahora que vengo de correr, que tengo mi cerebro funcionando a toda máquina, que hace medio año que no escribo nada; me ha dado por ponerme manos a la obra.

Yo tenía pensado en un principio, que esto fuese un lugar libre donde expresarme, sin necesidad de ponerme una careta que llevo cuando hablo con una persona cualquiera. Porque no se vosotros, pero yo soy así. Depende de con quien esté, soy de una forma u otra. No es que mienta ni que finja, simplemente escondo parte de mi forma de ser. No he conocido a nadie con el que pueda sentirme cómodo siendo como soy. En fin, cuestión de desconfianza.

El problema fue que me empecé preocupar sobre quién me leía y que pensaría, y eso llevo a escribir cosas menos personales, a digamos mantener una careta cuando esto lo hacía para librarme de ellas. Me dejó de ayudar, me dejó de motivar, así que fui yo el que dejó de escribir. Y como cada vez que dejas algún buen hábito, cuanto mas tiempo pasa, mas te cuesta volver.

Pero he decidido volver. Volver porque con careta o sin ella, escribir me venía bien. Al menos me sentía algo mas libre que de costumbre. Menos atado a convencionalismos y a mi imagen. No se si será para ser sincero al 100% 90% o 0%, pero sinceramente me da igual. El acto de escribir, me hace poner la cabeza a funcionar, me hace pensar, reflexionar sobre mis ideas, pulir mis razonamientos, y ese esfuerzo siempre suma.

Espero que esto sea, ayer, hoy y siempre, el sitio de mi recreo.