domingo, 6 de enero de 2013

Reflexiones

Me quedan unas horas para cumplir 24 años y me he propuesto hacer una reflexión general sobre mi, es decir, como estoy y como me siento actualmente. Cuando empecé a escribir me propuse que si hablaba de algo sería totalmente sincero.

 Hay cosas de mi vida, modos de pensar, o convicciones de las que nunca daré parte. Quizás por ser exageradas, demasiado radicales o oscuras. Por eso hay temas de los cuales no opino. Pero ya que me he propuesto hablar del ahora en mi, sobre eso voy a ser 100% sincero.

Llevo unos meses viviendo en un piso de estudiantes en Santander. Vida nueva pensaba yo, pero básicamente en mi modo de ser no ha cambiado gran cosa. Cierto que ahora soy vegano, que ni fumo ni bebo, pero no es tanto un cambio mío de sensibilidad como una cuestión de curiosidad y disponibilidad. Es decir, no es que haya cambiado mi forma de pensar (siempre me he sentido sensible ante las injusticias que sufren los animales) sino que siento que ahora que vivo a mi aire es el momento de ver si realmente es factible una dieta vegana. En cuanto a eso, a pesar de que he adelgazado un poco, me sigo encontrando con las mismas fuerzas y una moral altísima tras superar las cenas familiares de Navidad, las gracias continuas de mi familia, las fiestas nocturnas ... Así que a pesar de la opinión de muchos en eso voy a seguir adelante.

En otro orden de cosas, lo que no ha cambiado nada de nada es mi apatía. Digamos que no encuentro nada que me motive especialmente. Entreno por mantenerme activo y por costumbre, sin embargo no consigo estar comprometido, al menos no al nivel que me exijo. No es una cuestión ni de gente ni de rendimiento personal. No sabría definirlo. Con el Máster, aunque no lo diga públicamente, estoy un poco decepcionado. No era como me lo esperaba y también por dejadez mía, no me encuentro cómodo. Siento como si todos ya tuviesen todo organizado menos yo, y esa sensación de angustia realmente es una de las cosas que más odio.

Y en lo más personal sigo encontrándome bastante solo. No me considero una persona sociable, a pesar de mis esfuerzos nunca lo he sido. Me encanta ayudar en lo que pueda a cualquiera, pero mas allá me cuesta tanto crear un vínculo, como mantenerlo. Es con mucho lo que más odio de mi personalidad y lo que quizás más he intentado corregir. Aunque la verdad es que muchas veces me siento mejor solo y renuncio a tener compañía así que en eso no tengo remedio. Es una especie de relación de amor-odio muy duradera ya.

Y todo esto soy yo a grandes rasgos. Inconforme siempre supongo, pero bueno creo que es mejor así. Como le dije a alguien alguna vez no creo que nunca consiga ser feliz. Solo podré estar contento por momentos, pero nada más.

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